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3 comedias para superar el fin de las vacaciones

Sabemos que este fin de semana muchos estaréis malhumorados ante la perspectiva del regreso al trabajo. Y como nos gusta mimaros, os hemos preparado una selección de comedias que podéis ver en distintas plataformas para que la vuelta a la realidad os sea más leve.

¡Allá vamos!

Schitt’s Creek

Seis temporadas de pura felicidad. La comedia canadiense de Dan y Eugene Levy (que son padre e hijo, por cierto) ha triunfado en todo el mundo: Schitt’s Creek, cuya última temporada fue galardonada con cinco premios Emmy, ha llegado lejos. Muy lejos. Cuenta la historia de los Rose, una familia adinerada que, cuando pierde todo su dinero, decide mudarse a Schitt’s Creek, una pequeña localidad que les pertenece, para arreglarla, venderla y recuperar su tren de vida. Pero, por supuesto, nada sale según lo previsto…

Schitt’s Creek es una de esas series a cuya primera temporada le cuesta encontrar el equilibrio. Algo relativamente habitual en las comedias y, en este caso, sirvió para que la serie revelase todo su potencial. La comedia de Pop (la cadena que rescató Día a día tras su cancelación en Netflix) es una producción particular, con personajes a cada cual más excéntrico, y trajes igual de originales. ¡Os los presentamos! La madre, Moira Rose, interpretada por la brillante Catherine O’Hara, es una antigua actriz de éxito que sigue yendo de diva a pesar de llevar años sin trabajar. El padre, Johnny Rose, es el más humilde de todos. La hermana, Alexis Rose, es una mujer que, a pesar de pertenecer a la jet-set, no se puede permitir ser influencer. Y, por último, David Rose, un unicornio pansexual cuya mayor afición es criticar a los demás. En fin, una familia a la que no le resultará fácil encajar en el pueblo… sobre todo porque no tienen intención de hacerlo.

En resumen, Schitt’s Creek es una serie con encanto, mucho drama familiar y una representación decente de la comunidad LGBTQ+. Ideal para reír, pero también para llorar (un poquito). La tienes disponible en Movistar+.

Starstruck

Starstruck, creada por las cómicas Rose Matafeo y Alice Snedden, le da un giro moderno a la trama de Notting Hill. Tras un lío de una noche, Jessie (Rose Matafeo) se enamora de Tom (Nikesh Patel), una superestrella del cine. Matafeo, recién llegada de Auckland y sin pelos en la lengua, juega con su acento y sus orígenes para hacer reír en Londres, su nuevo hogar. Esta coproducción de BBC Three y HBO Max es una agradable sorpresa, y no hay un solo episodio, de los seis que conforman la primera temporada, que se haga aburrido… ¡De hecho, se pasan volando!

Obviamente, Starstruck no se dirige únicamente a los amantes de las rom-com, aunque los espectadores más avispados disfrutarán captando las referencias del género e ilusionándose ante esta pareja tan improbable. El humor sin recatos de las creadoras y el choque de culturas funcionan muy bien y aportan modernidad a un género que a veces es demasiado rígido. Y no olvidemos que la amistad también es un punto importante de la serie, lo que proporciona un resultado sorprendente. Mención especial para Minnie Driver, que aparece en algunos episodios para decir que “el talento reconoce el talento”. Y la guinda del pastel, ¡la serie tendrá una segunda temporada en HBO Max!

Motherland

Motherland cuenta el día a día de un grupo de madres que intentan (a trancas y a barrancas) compaginar la educación de sus hijos con su vida profesional y personal. Lo que en principio parece una premisa más que vista, se transforma de la mano de Sharon Horgan en una serie divertidísima con la que cualquier puede empatizar… aunque seguro que las madres se verán reflejadas en más de una ocasión.

La protagonista es Julia (Anna Maxwell Martin), que pierde los papeles cuando su madre le comunica que ya no piensa hacer de canguro de sus nietos. La desesperación con la que protagonista, junto con sus compañeros Liz (Diane Morgan) y Keving (Paul Ready), trata de encasquetar el cuidado de sus hijos a diestro y siniestro para poder hacerse cargo de su vida profesional, marca desde el principio el tono de la serie, examinando desde el cinismo lo complicado que puede llegar a ser criar a los hijos.

Más allá de los personajes (el grupito de madres “populares”, encabezado por Lucy Punch en el papel de Amanda es para partirse), el reparto y las tramas disparatadas de cada capítulo, Motherland hace una crítica que a muchas no les pasará desapercibida: la comedia señala que, a pesar de estar en pleno siglo XXI, se sigue esperando que las mujeres se encarguen de su trabajo, los hijos y el hogar sin ayuda de sus parejas… cuyas apariciones en la serie son más que anecdóticas.

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Published by
Júlia Llàcer Adell