Tras seis temporadas, The Good Fight, la serie que empezó como secuela de The Good Wife, se despide de su público habiendo amasado más fama y seguidores que su predecesora. La que empezó hace cinco años como una serie centrada en el volantazo profesional que dio la icónica Diane Lockhart (Christine Baranski) tras separarse de Alicia Florrick, protagonista de The Good Wife , se ha terminado convirtiendo en, posiblemente, la producción más prestigiosa de los King, y en la sátira política que ha marcado nuestra época.
La sexta temporada retoma el hilo donde lo dejó la quinta, es decir, con Joe Biden como nuevo presidente de Estados Unidos y tras el asalto al Capitolio, en el cual Kurt (Gary Cuele), el marido de Diane, parece estar involucrado. Los acontecimientos de este nuevo ambiente de incertidumbre pondrán a prueba el despacho de Reddick, Boseman & Lockhart, un bufete de Chicago mayoritariamente afroamericano.
En su última temporada, The Good Fight sigue apostando por la particularidad que más la ha ayudado a sobresalir: su magnífica capacidad para incorporar la actualidad en sus tramas, gracias al excelente trabajo de reescritura de guion de los King cuando detectan un cambio político en la sociedad estadounidense. Así pues, esta temporada seguirá abarcando las consecuencias del asalto al Capitolio, la amenaza del estallido de una segunda Guerra Fría, e incluso la anulación del derecho federal al aborto.
En estos tiempos de incertidumbre, nos reencontraremos con una Diane descorazonada, atrapada en un déjà vu constante, que tratará de distanciarse de la situación dándose a placeres más mundanos. Diane no será la única afectada por el ambiente turbulento: también le pasará factura al bufete de abogados, en el que ha habido cambios, tanto en las esferas más altas como entre los más novatos. A este panorama, se le une la llegada de un nuevo socio nominal, el extravagante Ri’Chard Lane (Andre Braugher), dispuesto a darle un lavado de cara a la firma. Eso sí, seguiremos disfrutando de casos con una gran carga social y política en los que nuestros juristas no siempre tendrán claro si están trabajando para el lado “correcto”.
Volveremos a encontrarnos con los rostros conocidos del reparto habitual y alguna que otra sorpresa. A modo de despedida, los King han decidido invitar a algunos de los personajes más queridos de The Good Wife, entre ellos, a Eli Gold (Alan Cumming), el irreverente asesor de comunicación, y a la abogada Elsbeth Tascioni (Carrie Preston), cuyas extravagancias serán un punto a favor en los tribunales. Tambié se invitó Julianna Margulies, protagonista de The Good Wife, a aparecer en algunos episodios y, aunque la actriz aceptó en un principio, la colaboración no fue posible por desacuerdos monetarios. ¡Una pena! Nos habría encantado verla recorriendo Reddick, Boseman & Lockhart con sus tacones.
El primer episodio de la última temporada de The Good Fight se estrenó el 8 de septiembre en Movistar+, con estrenos semanales hasta el día 10 de noviembre, fecha en la que se emitirá el último capítulo.