Después de un accidente, el hacker Van Breukelen es arrestado porque se encuentra un arma en su poder. Durante el interrogatorio, permanece obstinadamente en silencio y no revela la identidad del cliente para el que trabaja por encargo. Pero su lealtad no es recompensada, al contrario: su cliente, el Gangster Decker, acaba con su vida. Con un truco, Decker ahora intenta conseguir al ex hacker Raphael Münch como reemplazo para el encargo. Sin sospechar, se metió en el trato.