Un coche atraviesa la autopista a una velocidad excesiva. Tom y Semir pueden detener el coche al volante del que está sentado el gángster Pérez, vestido de sacerdote. Pérez sólo habla español y supuestamente no sabe que es culpable. Pero cuando de repente saca un cuchillo y trata de escapar, es arrestado por la policía. Tom y Semir descubren una jaula con un valioso gato salvaje en el maletero del coche de Pérez.