Un hombre es encontrado muerto en un barco amarrado en el puerto deportivo de Burdeos. Su cuerpo está cubierto de pústulas, sus extremos ennegrecidos... Para Alex, el diagnóstico es infalible: ¡este hombre ha muerto de peste! Se establece un perímetro de seguridad alrededor del barco y las últimas personas que lo han frecuentado, miembros de su familia, puestas en cuarentena en la bodega que poseen.