Cuando aparece un Asura Crying durante el intento de Reishirou de detener al culpable detrás de la caza de demonios, explica cómo Tomo también está en peligro de convertirse en uno y le ordena que deje el asunto en paz. Sin embargo, con Ania desesperada por descubrir qué le ha sucedido a su hermana y Tomo juró protegerla, no pasa mucho tiempo antes de que se encuentre cara a cara con los Asura Llorando.