Los Yorozuya están jugando a una típica actividad veraniega, partir la sandía, con la princesa Soyo, quien parece tener cierto fanatismo por los hechizos del Dragon Quest. Más tarde, los Yorozuya tendrán que ayudar a otro niño, en este caso a Seita, el hijo de las cortesanas de Yoshiwara, quien necesita ayuda con la tarea de las vacaciones de verano.