Inuyasha y sus amigos llegan a una aldea, los aldeanos creen que Inuyasha es el Dios Bestia y lo veneran. Le dan poco alimento y justifican esto diciendo que sus campos son atacados y es lo único que queda. Cuando ellos investigan, se encuentran con unos monitos que hacen trucos molestos y hechizan a Inuyasha dándole una pequeña roca mágica que se hace enorme y se queda pegada a él.