Tan pronto como se entera de que los hombres de Nezir secuestrarán a Bahar, Sarp, que toma aliento en Tarlabaşı, echa a Bahar y a los niños del vecindario. Incapaz de entender cómo Sarp recibió esta noticia, Suat sospecha de Şirin y Münir. Esto la aleja de la duda y de ambos. Sarp, que ha anhelado que Bahar y los niños los conozcan durante mucho tiempo, está feliz de salvarlos y mantenerlos alejados del peligro a pesar de todo. Bahar no está contenta porque deja a todos donde están esos hombres peligrosos. Bahar, que quiere que Sarp averigüe si todos están a salvo, está preocupado por ellos. Pero Sarp ocultará el hecho de que uno de ellos murió para que Bahar no esté triste. Esta noticia de la muerte volará a todos en pedazos