La pandilla está en desorden. Ewan finalmente tiene lo que siempre quiso: status y su propia oficina. Y hay una oportunidad sorpresa para la riqueza más allá de las fantasías más salvajes de Ewan. Pero hay una serie de condicionantes lo enfrentan a un dilema moral. Josh y Abi intentan ser una 'pareja normal' pretendiendo que Josh no es millonario. Watto vive en un barco. Ahora quebrado, se da cuenta de la dolorosa realidad de que ser pobre no lo hace bueno, así como ser rico no lo hizo malo. Leon comprende el verdadero valor del dinero, y finalmente resuelve su relación con Casey.