La señorita O se va al sector 218 a cumplir una misión súper secreta en la que está en juego el destino del mundo. Mientas el mando queda vacante, todos los agentes quieren ser los que dirijan el cuartel. Para reducir el tiempo que tardan los agentes en resolver los casos, los x obligan a Olympia y Otis a trabajar con el robot Omega, lo último en tecnología de la División.