Dos malvados científicos alienígenas abducen al gato Pidsley y a Shaun a bordo de su platillo volante. Por desgracia, un error tonto hace que los alienígenas cambien los cerebros de los animales. Shaun y Pidsley son devueltos a la Tierra, sin darse cuenta de que están en los cuerpos equivocados, lo que provoca gran confusión en la granja.