La Federación sigue en guerra, pero la vida se normaliza en el DS9. Por fín, Dax y Worf ya están planeando su boda. Sin embargo, la preparación de una boda tradicional Klingon de Worf se encuentra con un obstáculo: Sirella, la esposa de Martok, se niega a aceptar a Dax como miembro de la familia, y esto es necesario para que Dax pueda incorporarse a la casa de Martok...