Después de atrapar con éxito a un criminal, Eugene entrena para ser un guardia real. Desafortunadamente, el Capitán de la Guardia, que pasa a ser el padre de Cassandra, comparte el mismo odio de su hija por él. Mientras tanto, Rapunzel se prepara para su retrato real, que va a ser pintado por el pintor italiano Giovanni. Pero no se va a dar cuenta que este pintor no es quién dice ser.