Eph y Nora luchan por salvar la vida del capitán Redfern antes de encontrarse cara a cara con los terribles efectos del virus.
Un aumento en los ataques de ratas le indica a Fet que algo inexplicable ocurre en las entrañas de la ciudad.
Liberado de la cárcel, Setrakian comienza su propio plan despiadado para detener la propagación de la enfermedad.