Hope Wilson sabe que hay algo diferente en el hombre magullado y sin aliento que se topa con el refugio para personas sin hogar que dirige con su mentor, Jack Parsons. Parece un drogadicto, pero sus manos son suaves y sus uñas cuidadas. Tom Cooper no sabe quién es, dónde está y por qué dos hombres bien vestidos, Vincent y Cole, lo están persiguiendo. Solo sabe que la pequeña caja de metal que defiende contiene cinco frascos que contienen todos sus recuerdos, reducidos a la forma de cristal, así como un inyector especialmente diseñado que puede eliminar o restaurar esos recuerdos.