La serie se desplaza a algunas de las zonas más complicadas de la frontera mexicano estadounidense, concretamente al paso de San Diego, en California, uno de los que registra mayor tráfico de personas y también los índices de incidentes más altos. Aquí el equipo del programa será testigo de cómo los agentes detienen a grupos de inmigrantes que cruzan la frontera de forma ilegal, así como del desarrollo de las redadas sorpresa que acaban con los narcotraficantes detenidos.