El 17 de julio de 2014, el vuelo MH17 se estrella en el este de Ucrania. Las 298 personas a bordo fallecen, y los restos y víctimas quedan esparcidos por una amplia zona del Donbass, donde separatistas prorrusos ya combatían contra las tropas ucranianas. En medio del caos y la devastación, encontrar respuestas sobre por qué el avión cayó del cielo se convierte en un reto enorme. Con la desinformación propagándose en internet y los gobiernos occidentales luchando por obtener datos confiables, empiezan a surgir posibles explicaciones. Pero, ¿cuán fiables son estas fuentes?