Destinada a una comisaría de un pueblo de Occitania tras una operación que le dejó media cara marcada, la capitana de policía parisina Noémie Chastain ve cómo su periodo de recuperación obligatorio toma un rumbo muy oscuro. En lugar de limitarse a informar sobre la actividad de la comisaría y su posible cierre, de repente se ve envuelta en un caso de desaparición de hace veintitrés años. El primer barril que contiene el esqueleto de un niño es descubierto en la superficie del lago artificial bajo el que se encuentra el pueblo sumergido... A pesar de que sus superiores la consideran vulnerable, la capitana asume resueltamente el caso. Sin embargo, esta insólita investigación le hará recordar aspectos de su propia vida...