Un hombre misterioso se sienta en un reservado de un restaurante. La gente se acerca para hacerle peticiones: un padre con un hijo enfermo, una mujer que quiere ser más bonita, una monja que quiere escuchar a Dios otra vez. Este hombre puede satisfacer todos sus deseos, pero sólo a cambio de un precio: deberán renunciar a sus principios morales, a su conciencia, y ejecutar actos abominables. Pero el hombre no obliga a nadie. Su pregunta es siempre la misma: ¿hasta dónde estarías dispuesto a llegar con tal de conseguir lo que quieres?