La llegada de Leah, una nueva inquilina agita a William Mackay, uno de los fantasmas de Bedlam que inicia una brutal campaña de terror en su contra. Jed y Ryan investigan, pero pronto descubren que Mackay fue un hombre inocente injustamente enviado al manicomio. Ahora su fantasma, que busca venganza por los agravios en su contra ha hecho de Leah, quien esconde un oscuro secreto, su principal objetivo.