Para determinar la edad real de la Tierra, el geoquímico Clair Patterson desarrolló el método de datación con uranio y plomo para hacer un descubrimiento sin precedentes: calcular la edad de la Tierra en 4.500 millones de años. Pero los descubrimientos revolucionarios de Patterson apenas estaban comenzando. Patterson se propuso llamar la atención del público sobre los efectos perjudiciales del plomo en el medio ambiente y dedicó su carrera a luchar contra la industria química y del petróleo, logrando finalmente la mayor victoria para la salud pública del siglo XX.