Mayu Ōtsuka escribió sobre la historia de un hombre enmascarado que apareció en sueño, o eso es lo que cree. Hei le es ordenado recuperar una substancia robada, el contratista que la robó la escondió bajo un árbol de cerezo. Mayu se enamora de Hei y Saitou le confiesa su amor a Kirihara. En todo el embrollado, Kirihara ve el rostro de Hei pero la substancia que tenía que recuperar se esparce, haciendo olvidar de lo ocurrido a todo los presentes.