Elsa y Laurent Lacaze están perfectamente enamorados. Viven con su hija adolescente, Lucie, en las colinas de Moustiers-Sainte-Marie, un pequeño y remoto pueblo de la región francesa de Alpes de Hautes-Provence. Una mañana, Elsa desaparece mientras hace footing. Laurent no cree que se trate de una desaparición deliberada, pero los gendarmes se resisten a tomar el caso en serio. El mundo de Laurent y Lucie se derrumba cuando se dan cuenta de que Elsa les ocultaba muchas cosas.