Ali está tratando de acostumbrarse a la patología, aunque sea difícil. Lo peor es que Nazli ya no le ayudará a regresar a la cirugía. Mientras tanto, todo el equipo quirúrgico se moviliza por un paciente con un tumor extraordinariamente grande. Pero parece imposible extirpar el tumor sin matar al hombre. Beliz, por su parte, tiene una terrible sospecha sobre su amiga que acaba de dar a luz.