Beliz está decidido a no aceptar la oferta de Vuslat. Pero cuando los nuevos contratiempos no salen del hospital, la mano de Beliz empieza a ser difícil. Por otro lado, el nuevo asistente en jefe Nazlı está sobrecargado de trabajo, y la mente de Ali, que va de guardia de prisión en guardia de prisión, es si Nazlı lo olvida o no. Sin darse cuenta de los intentos de su madre, Ezo decide ayudar a Ali con Nazli. Pero Vuslat tiene planes diferentes tanto para Ali como para el hospital.