El soldadito Sam espera un paquete postal que le envía su tío Archivaldo. El paquete cae desde el cielo cuando él no está, y mientras Sam lo busca por todas partes con ayuda de Florence, él va visitando a todos los habitantes del país. Todos creen que es para ellos, y por supuesto el lío que se forma es obra de Zebedé, que ha puesto un poco de magia para que todos se diviertan con el paquete.