Alex está a punto de procesar a un hombre llamado Karl Mayes. Ella se entera de que él contrató a su padre para que lo defendiera. El padre de Alex es un alcohólico en recuperación y Mayes lo hace beber. Eventualmente, no está seguro de poder defender a Mayes. Lo que hace que Mayes se pregunte si puede confiar en que se mantenga callado.