Tras la aparición de unas nubes nucleares en el horizonte, el pueblo de Jericho se ve sumido en un caos absoluto al perder cualquier contacto con el exterior y quedarse sin electricidad. El terror, la rabia y la angustia se adueñan de sus habitantes.
Jake, el hijo del alcalde, regresa a su ciudad para reclamar la herencia de su abuelo, tras cinco años de ausencia, con un secreto y un oscuro pasado a sus espaldas. El joven se verá convertido en héroe al verse involucrado en el accidente de un autobús escolar tras la explosión.