En un apuro por salir de la casa, Debbie pierde el rastro de Franny y tiene que equilibrar su búsqueda de Franny con sus trabajos de manitas. Mientras tanto, Frank y Franny tienen un día de aventuras y carreras de marihuana. Ian y Mickey preguntan quién es el "hombre" en su relación. Carl, encantado, recibe un nuevo oficial de entrenamiento al que le encanta patear traseros. Cuando Brad y Cami se enteran de las complicaciones de salud de su bebé recién nacido, Lip y Tami intervienen para ayudar. El dinero recién descubierto de Kev y la falta de modestia resultan ser un problema.
¿Qué mejor que celebrar el estreno de A Town Called Malice en SkyShowtime que con otras tres series protagonizadas por familias (no siempre de sangre) de delincuentes?
Empezamos con Trailer Park Boys, una serie canadiense que ha conseguido convertirse en todo un fenómeno de culto gracias a sus excéntricos protagonistas, su humor irreverente (“políticamente incorrecto”, como dirían algunos) y una fauna de personajes secundarios de lo más estrafalaria (y entretenida)
Los protagonistas son tres delincuentes de poca monta que viven en Sunnyvale, un parque de caravanas de Nueva Escocia: Julian (John Paul Tremblay), el líder astuto y tranquilo que nunca suelta la botella de whisky, Ricky (Robb Wells), un tipo agresivo que siempre anda metido en problemas y que acaba de salir de la cárcel, y Bubbles (Mike Smith), el más dulce del grupo, amante de los gatos y con unas características gafas de culo de vaso. Los tres quieren rehacer sus vidas, ¿y qué mejor manera de hacerlo que grabándolo como si fuese un documental?