George cree que, al enviar a Tessa a Nueva York para una excursión de Navidad con su madre, le está haciendo a su hija el mejor regalo del mundo. Sin embargo, Tessa pronto aprende a tener cuidado con lo que desea, pues enseguida comienza a echar de menos a George y a Chatswin. Mientras tanto, Ryan descubre que es adoptado, lo que causa una tremenda agitación en la familia.